Por David Pellicer, Director de Sistemas de J.Gambín 

La Comisión Europea  ha definido recientemente las bases para la que está llamada a ser la próxima revolución industrial: la Industria 5.0. Se trata de un complemento de la anterior evolución, la 4.0, y estará basada en una industria sostenible, centrada en las personas y resiliente que permita una industria más competitiva para el futuro.

El pilar fundamental es la colaboración entre máquinas y humanos para mejorar la productividad, seguridad y calidad de las empresas industriales, donde las personas trabajaremos estrechamente con máquinas inteligentes que serán nuestras ayudantes en la toma de decisiones, consiguiendo el empoderamiento del trabajador y un cambio en el rol de ciertos trabajadores que requerirá una transformación con nuevas habilidades, que a su vez generará una competencia entre las empresas por captar al mejor talento humano.

La inteligencia artificial  o la robótica tendrán un papel fundamental en esta quinta revolución, por ejemplo el uso de cobots, robots colaborativos guiados por los humanos, o la aplicación de  ‘digital twin’, representaciones virtuales conectadas mediante sistemas ciberfísicos.

En materia de seguridad laboral, las tareas rutinarias y peligrosas serán realizadas por estos, dejando así a los humanos aquellas tareas dónde se precisa el uso de la razón y creatividad humana, consiguiendo así mejorar la salud laboral reduciendo el número de accidentes y dolencias.

Otro aspecto que será tratado es el desarrollo de estos sistemas basados en energías renovables que respeten el medio ambiente, otro pilar fundamental sobre el que se fundamenta esta revolución en materia de política medioambiental.

Se trata de ejes todos ellos actualmente tenidos muy en cuenta por el grupo J. GAMBÍN en todos los procesos que llevamos a cabo, en los cuales hemos ya implementado de manera decidida muchas innovaciones que van dirigidas en esta línea, al mismo tiempo que día a día trabajamos y evolucionamos para superar el reto que plantea esta nueva revolución industrial en la industria frutícola en general y en la citrícola en particular. 

Nuestra vocación de mejora constante y el enfoque continuo en el cliente nos hace mirar al futuro con determinación e ilusión aplicando nuevas tecnologías, al mismo tiempo que mantenemos el foco y la importancia en nuestro mayor patrimonio: las personas que integran GAMBÍN, permitiéndoles desarrollar su labor de una manera eficiente, ágil e innovadora.