En GAMBÍN la búsqueda de la excelencia a través de la mejora continua es un rasgo identitario grabado a fuego en el ADN de la empresa desde su fundación hace ya más de 60 años. Una filosofía aplicada en todos los ámbitos de la compañía con un solo fin: optimizar todos los procesos agrarios, operativos, comerciales, logísticos, tecnológicos y financieros para ofrecer el mejor producto posible con el servicio adecuado para satisfacer la demanda de sus clientes.  

Todos los departamentos de la empresa están implicados al máximo para seguir avanzando en un camino sin fin, en el que los cambios inherentes a la evolución de los factores intrínsecos y extrínsecos que influyen en el sector agrario en particular y el mundo de la empresa en general obligan a no dejar de dar pasos hacia adelante.  

La alineación de todos los integrantes del equipo, el planteamiento de nuevas estrategias y el análisis de las ya existentes son determinantes para la consecución de objetivos que redundan en el beneficio tanto de los clientes finales como de los proveedores, colaboradores y trabajadores que hacen posible el fin último de GAMBÍN: abastecer a sus mercados con cítricos de la máxima calidad, servicio y continuidad acorde a sus estándares exigidos.  

La formación constante juega un papel determinante en esta evolución. Por este motivo, recientemente tuvo lugar la denominada Jornada del Sistema de Excelencia Gambín. Un encuentro interno al que asistieron los directivos de la empresa para escuchar la ponencia de dos especialistas externos en management, estrategia empresarial y mejora continua. El preámbulo óptimo para la generación de un clima de debate interno en el que evaluar el trabajo realizado en los últimos meses al mismo tiempo que alinearse en la consecución de nuevos objetivos.  

El trabajo en equipo y la determinación en la obtención de los mejores resultados son también valores irrenunciables de la propiedad, dirección y componentes de GAMBÍN. Algo que quedó ratificado en esta intensa jornada de trabajo celebrada en un entorno idílico como es el puerto de la ciudad de Alicante.