El equivalente a 12 vueltas y media al mundo. Esa es la distancia que recorren anualmente los camiones GAMBÍN. Más de 500.000 kilómetros al año para hacer posible que nuestros productos estén a tiempo en el lugar requerido. Con estos datos, no es extraño que al realizar cualquier viaje por autovías o carreteras de España o Europa las posibilidades de encontrarse con uno de nuestros vehículos sean grandes. 

No se trata, sin embargo, de algo sencillo. Los cítricos, como todo producto perecedero, pierden calidad y propiedades a lo largo de su vida. Esto hace que cada día transcurrido desde su recolección hasta que son puestos a disposición de los clientes en el punto de venta sea trascendental. 

Una ecuación en la que desempeña un importante papel otra variable: la temperatura. Mientras que el paso de nuestros cítricos desde su recolección en nuestras fincas hasta la planta de selección y envasado se realiza a temperatura ambiente, el viaje hacia los puntos de distribución se efectúa a temperatura y humedad controladas. Algo imprescindible debido a lo determinante de mantener la cadena de frío. 

Sin olvidar la delicadeza y la higiene. En el transporte de recolección, los factores clave se centran en evitar daños mecánicos a la fruta, asegurando su correcta manipulación y estiba de los envases. Posteriormente, en la fase de distribución, los vehículos han de estar verificados y exentos de cualquier fuente de contaminación que pueda suponer un riesgo para la seguridad alimentaria del producto.

Por todo ello, el transporte debe estar siempre adaptado a la tipología del producto que transporta y a las zonas que debe transitar. La flota de vehículos GAMBÍN cubre todo el abanico de situaciones y condiciones. Desde camionetas de reducido tamaño para tener acceso a las fincas más recónditas a través de complicados caminos a trailers frigoríficos capaces de cruzar el continente transitando por las amplias autovías europeas. Un recurso logístico fundamental que se complementa con un equipo de colaboradores externos cuando las necesidades de la campaña lo exigen. 

La importancia del factor humano 

Con todo, y como siempre ocurre en todos los procesos que aseguran el éxito de nuestra empresa, esto no será posible sin un componente fundamental: las personas. Los conductores son quienes hacen posible que la mercancía viaje en las condiciones y tiempo óptimos de punto a punto. Y para ello, en GAMBÍN contamos con los mejores. Profesionales con un absoluto conocimiento y dominio del vehículo. Algo que está garantizado por su cualificación y capacitación, que son renovadas periódicamente. No sólo en lo que respecta a la mecánica y las carreteras, sino también al producto que transportan. Los chóferes GAMBÍN conocen perfectamente los cítricos y todas las etapas y procesos. 

Además, aunque hoy en día los sistemas de navegación y geolocalización proporcionan una gran ayuda para encontrar loas mejores rutas, sigue siendo un valor añadido la experiencia y la capacidad para adaptarse ante cualquier situación imprevista garantizando que las mercancías estén disponibles a la hora requerida. 

Por todo esto, y como en tantas otras áreas de nuestra empresa, apostamos por la continuidad, permanencia y formación continua de nuestros profesionales. Como refleja el hecho de que algunos de nuestros conductores lleven en nuestra empresa más de 25 años. 

¿Y tú, quieres formar parte del equipo GAMBÍN? Envíanos tu CV a través de este enlace (www.jgambin.com/empleo).