Que internet y las nuevas tecnologías de la comunicación han abierto una nueva ventana al mundo a todos sus usuarios suena, en el momento que nos encontramos, poco menos que a tópico. La presencia en los canales digitales es prácticamente una obligación para cualquier profesional o empresa en su vocación de ser competitivos a todos los niveles para poder generar los recursos que le permitan cumplir con las necesidades y expectativas de sus stakeholders. Esto hace que el marketing digital en el sector agroalimentario sea un camino irrenunciable. 

El comercio electrónico ha experimentado un auge que ha cambiado nuestro modo de comprar y de consumir, sí, pero también de vivir. Alterando los ritmos vitales y hábitos de millones de personas, así como la configuración de tiendas, locales, mercados, centros comerciales e incluso barrios enteros de ciudades. Todos ellos contemplan cómo sus instalaciones o calles han mutado, adaptándose a los ritmos de afluencia de personas que han dejado de acudir completa o parciamente a lugares que durante décadas eran punto de encuentro o, por el contrario, han encontrado en ellos nuevas propuestas un reclamo que complementa o satisface totalmente la nueva experiencia de compra.  

Algunos estudios cifran el aumento del e-commerce durante el primer año de pandemia en nada menos que un 50%; una cifra que continúo en crecimiento durante el segundo año, con una subida del 35%. Ni que decir tiene que en medio de un escenario tan disruptivo, lo que fue una oportunidad para algunos fue una sentencia para otros. Muchos negocios han reaccionado de manera ágil y decidida para adaptarse las nuevas circunstancias, dando un importante salto ya no sólo tecnológico, sino también cultural, que ha supuesto un avance que de otro modo habría supuesto años. No sólo sobrevivieron, además han pivotado en su modelo haciendo del uso de las nuevas tecnologías de la comunicación, información y digitalización una parte imprescindible de su core business. 

Capítulo aparte merecería ahondar en derivadas transversales como el teletrabajo, el cambio en las nuevas modalidades de pago o la configuración de un nuevo escenario logístico en lo que a las entregas en “última milla” se refiere. Todo ello directamente relacionado con la pandemia e intensificado por el inestable escenario geoestratégico que ha comenzado a plantearse en Europa partiendo de Ucrania y que empieza a atisbarse en Taiwan, con sus ya evidentes consecuencias en el mercado energético, el sector logístico o el de determinadas materias primas. Aquí, nuevamente, la continuidad de muchos negocios y empresas vendrá determinada por su capacidad para seguir en contacto con sus clientes actuales y potenciales.

Marketing digital en el sector agroalimentario: el B2B

Hasta el momento hemos hablado de vender, sí. Siempre lo estamos haciendo, de un modo u otro, cuando el tema central es la empresa. Mucho más cuando nos centramos en el ‘negocio a consumidor final’ (B2C). ¿Pero qué ocurre cuando nos adentramos en ‘negocio a negocio’ (B2B)? Aunque cada sector cuenta con sus particularidades y excepciones, lo cierto es que aquí los tiempos y procedimientos cambian, pasando a planos mucho más distintos y complejos de los que se dan cuando nos situamos en el sector ‘retail’ o del pequeño consumo. Mucho más si hablamos de marketing digital en el sector agroalimentario. 

El marketing y la comunicación en el B2B desempeñan también un rol fundamental, que Grupo GAMBÍN no ha hecho más que potenciar en los últimos años y, por supuesto, intensificado durante la pandemia.

A través de sus distintos canales de comunicación, en constante evolución y desarrollo, la empresa consigue mantenerse cerca de todos sus grupos de interés: desde accionistas y dirección a clientes finales, pasando por proveedores, colaboradores y empleados. 

• Apertura de nuevos mercados; mediante su web y el posicionamiento en los motores de búsqueda (SEO), Grupo GAMBÍN consigue ofrecer soluciones de proveduría a aquellas empresas que buscan productos que coinciden con las especificaciones demandadas, especialmente en lo que a producción y exportación de cítricos se refiere. Tanto si se ubican en España como fuera de nuestras fronteras, sin importar la distancia. 
• Mantenimiento y fidelización de clientes; la web y las redes sociales son un formidable punto de encuentro para Grupo GAMBÍN con sus mercados, donde los clientes actuales encuentran información actualizada sobre productos disponibles, calendarios varietales o distintos formatos, sí. Pero también pueden adentrarse en el funcionamiento y día a día de la empresa gracias al material audiovisual en el que los procesos y personas que participan en ellos son perfectamente descritos. 
• Reputación empresarial y RSC; la transparencia es clave a la hora de forjar relaciones sólidas y duraderas en el mundo de los negocios. Algo que forma parte del ADN de Grupo GAMBÍN desde sus orígenes hace ya más de 60 años y que, como no podía ser de otra forma, se proyecta también en su imagen digital. En los distintos canales y plataformas no sólo se informa, sino que también se abre las puertas a distintas vías de colaboración y sinergias con empresas, entidades y personas del entorno tanto sectorial o geográfico. 
• Generación de empleo; si al comienzo del artículo mencionábamos cómo las nuevas tecnologías de la información y la comunicación han cambiado el modo en que consumimos, sin duda alguna también lo han hecho en el modo en que se mueve el mercado laboral. Internet es la principal puerta de acceso de los profesionales a las empresas y viceversa. La potenciación de este canal por parte de Grupo GAMBÍN ha permitido dar un salto tanto cuantitativo como cualitativo en los procesos de selección y en la captación de talento. 

Cerca de 60.000 páginas vistas en www.jgambin.com (datos de Google Analytics) en el último año, 1,7 millones de impresiones en Facebook e Instagram entre posts, fotos y vídeos en el mismo periodo (datos de MetriCool) y otros muchos miles de impactos generados en canales como LinkedIN, Google Business o medios externos consolidan el esfuerzo realizado por Grupo GAMBÍN en el área del Marketing y la Comunicación aplicado al marketing digital, el SEO y las redes sociales. 

* Iván J. Muñoz es director de Marketing y Comunicación en Grupo GAMBÍN